domingo, 15 de febrero de 2009

Lo extraordinario de la vida



Ayer me vino a la cabeza una de las frases que Pemán escribe en el Divino Impaciente: "Virtud que se paladea, apenas sí es ya virtud". ¿El motivo? Lo explico rápidamente.
En el Encuentro de Jóvenes que celabramos ayer entre todos los colegios Nazaret de Barcelona, tuvimos la suerte de conocer en directo a la Hna. Presentación. Ella es la religiosa de la Congregación de las Religiosas de Sant Josep de Girona a la que la explosión de una bomba en el Congo el octubre pasado, la ha dejado en una silla de ruedas con las dos piernas amputadas.
La presencia de esta misionera conmocionó a todos los que la escuchamos. Transparentó a Dios sin buscar hacerlo... y eso fue precisamente lo más extraordinario! Dios estaba... y eso fue precisamente lo más extraordinario!
Dios nos habló una vez más, en esta ocasión a través de una misionera que, todo y tener una historia de dolor y sufrimiento a sus espaldas, en ningún momento se hizo eco de su actual situación, sino que constantemente se refirió a Dios y a sus hermanos, los más pobres.
Ayer fuimos testigos de la fe heróica que pasa desapercibida; ayer fuimos testigos de la virtud no paladeada... y por eso Dios nos habló!
Gracias, Hna. Presentación por dejarLE hacer a Él! Cuánto tenemos que aprender!

8 comentarios:

Aurora M. dijo...

Experiencia la de ayer que me ha hecho valorar todo aquello que Dios nos ofrece en nuestras vidas. un testimonio realmente conmomedor pero a la vez que fortalece el corazón. Sabernos siempre acompañadas por Aquel que abrazó la Cruz por nosotros y que a la vez nos invita a nosotros también abrazar la cruz y amarla. Sólo puedo dar las gracias por el dia vivido y compartido, una experiencia y un testimonio que no ha dejado indiferente y que ha dejado claro que a pesar de los obstáculos el Amor de Dios es tan grande que nos ayuda a superar cualquier dificultad.
GRACIAS!!!!

Cris dijo...

Haber escuchado ayer a la Hna. Presentación fue algo que realmente conmovió a todos los que allí estábamos presentes...unos conocían su historia, otros no, pero eso no fue impedimento para nadie, y el silencio que se hizo en el salón fue espectacular...Dios hablaba a través de ella de manera sencilla, Dios nos habló a todos y fuimos saliendo del salón conmovidos...es admirable la sencilleza de esta mujer y la paz y serenidad que transmitía a pesar de todo lo sufrido...Dios habita en ella y ayer nos volvió a demostrar como nos dice San Pablo en Filipenses 4,13 que "Todo lo puedo en Aquel que me conforta". ¿En quién sino?

Muchas gracias!!

Leticia dijo...

La Hna. Presentación consiguió lo que se propuso.. nos hizo llegar a Dios a partir de sus palabras que eran muestra de una heoricidad muy ligada a la humildad, caridad y sobretodo... al AMOR!
Me llamó la atención que cuando le hicieron la pregunta de "¿Qué has perdido?" No hizo en ningún momento referencia a sus piernas sino que su dolor era más interno. Lo que más mal le dolía era que había perdido aquel estilo de vida que tanta felicidad le aportaba, una vida de ENTREGA completamente hacia Dios y hacia los que la necesitaban.
Esta mujer es un testimonio que nos muestra cómo ser FUERTES, ante obstáculos que a veces pueden dar un giro a nuestras vidas... pero esta FUERZA no se puede conseguir si no tenemos a Dios presente en todo momento (sea bueno o malo)!!!

¡Gracias!

annarita dijo...

"¿Quién nos separará del amor de Cristo? La tribulación, la angustia, la persecución, el hambre, la desnudez, el peligro, la espada? En todas estas cosas somos más que vencedores, en virtud de Aquel que nos amó."(Rom 8,35-37)
Ayer hemos visto estas palabras encarnadas.

Cecilia dijo...

¿Que hoy no hay santos? ¿Que no hay héroes? Los que tuvimos la gracia de escuchar a la Hna. Presentación damos testimonio emocionado de que HAY HÉROES Y HAY SANTOS.
Dios nos lo hizo patente.
Gracias a las que han hecho posible que conociéramos personalmente a la Hna. Presentación.
Hay mucha ESPERANZA en el mundo.

Aurora dijo...

Me gustó la sencillez, la bonomía de su rostro, pero quizás, lo más impresionante es descubrir que Dios habita en lo pequeño, en lo ordinario, haciendo algo sumamente extraordinario. La hermana Presentación, ha dejado ver que durante toda su vida Dios la ha preparado para esto. seguramente nos hará bien a todos

cristina dijo...

Agradezco a la hermana Presentación el habernos puesto cara a cara ante un Dios humilde, entregado hasta el extremo por Amor, un Dios que habla de esperanza y de fidelidad...
Gracias hermana Presentación por ser TESTIGO!!
Ojalá nuestras vidas se parecieran un poco a la suya...

Chiara dijo...

Cuando la Hna. Presentación empezó a hablar me sorprendió: me esperaba que en su testimonio relatara el accidente que la dejó sin piernas, y hasta el final me pareció imposible que pudiera omitir un hecho tan impactante...Pero no fue así, ni una palabra, ni una referencia al accidente...y a medida que la iba escuchando describir todos sus años de misión en el Congo, de vida entre los pobres y al servicio de los enfermos, en un país en guerra donde la vida te la juegas cada día, me iba avergonzando cada vez más de mis expectativas iniciales...Fue un testimonio de Vida con mayúscula... Y no me extrañaría que Jesús, cuando dijo a sus discípulos que “nadie tiene amor más grande que él que da la vida por sus amigos”, en su corazón estuviera pensando en personas como ella.