sábado, 12 de marzo de 2011

"Terapia espiritual"

Esta es la metáfora que ha utilizado nuestro obispo, D.Bernardo, hoy en el retiro que ha dado en la Concepción para tratar la Cuaresma. Hacía la analogía de un Dios/Médico que se hace medio del Espíritu Santo como medicina para tratar nuestras "enfermedades".
Decía que, ante la Cuaresma, nos presentamos con una serie de "problemas" que llevamos internos y tenemos la necesidad de diagnosticar qué nos pasa. Tenemos heridas que tanto nos causan dolor a nosotros mismos como a los demás. ¿Los síntomas? Buscamos la luz en otros sitios que son simples lamparillas que no nos dejan ni ver las cosas tal cual son. Nos quedamos sedientos y hambrientos y cualquier alimento no es suficiente para saciarnos. Estas heridas, son las que nos llevan a desterrarLe del corazón.
Pero el Médico no puede permitir que su Criatura se pierda, y por ello nos envía a partir de la Palabra su Espíritu sanador que obra mediante el consuelo del propio arrepentimiento al ver que pecamos. Nos da oportunidades. Y en esta ocasión, Cuaresma, nos llama una vez más a cambiar. A vivir en constante cambio. Pero, para ello, pacientes im-pacientes debemos poner la voluntad en la conversión y dejarnos sanar para no volver nuestros pasos atrás. Sin miedos a afrontarnos a los destierros cotidianos pues Dios quiere de esos momentos, oportunidades para purificarnos y crecer en la necesidad de más amarle y más buscarle.

No hay comentarios: